Servir en las fuerzas armadas es una importante vocación y un privilegio, y desde luego no es algo con lo que se pueda comerciar a modo de moneda de cambio en el ámbito de la política de inmigración. Sin embargo, estos congresistas están tratando de colar esta disposición dentro de la más amplia Ley de Autorización de la Defensa Nacional, que establece el presupuesto para el Departamento de Defensa.
Los cubanos han vivido en una isla desierta informativa durante más de 50 años. Diez millones de personas, en su momento una parte dinámica del mundo, en sintonía con éste y que recibía información e incluso inmigrantes, quedaron aislados en cuanto Fidel Castro tomó el poder en 1959. Y que el mundo no haya hecho nada para ayudarlos tras cinco décadas de opresión es un ultraje.