El procurador general Eric Holder sufrió una enorme derrota la semana pasada en su guerra contra la integridad de las elecciones. Un juez federal rehusó emitir un amparo preliminar contra la ley de reforma electoral ómnibus de Carolina del Norte, que incluye la identificación del votante (Voter ID) además de medidas como la eliminación de la posibilidad de registrarse el mismo día de las elecciones.