La semana pasada, Pekín anunció que un caza J-15 había sido lanzado y había aterrizado con éxito desde su nuevo portaaviones, el Liaoning. El anuncio, acompañado de videos, deja claro que China ha dedicado recursos sustanciales (tanto financieros como humanos) para alcanzar su objetivo de operar con portaaviones.
La semana pasada, el general chino Zhu Chenghu afirmó que China “tendrá que modernizar su arsenal nuclear” pues la defensa antimisiles de Estados Unidos “puede reducir la credibilidad de la disuasión nuclear [de China]”. Incluso si esta afirmación reflejaba la realidad, esa debería motivar a Estados Unidos para fortalecer sus defensas.