El comercio está de nuevo en la agenda del presidente Obama, debido a algunas menciones destacadas incluidas en su discurso sobre el Estado de la Unión. Según el presidente, las propuestas para los Acuerdos de Asociación Transpacíficos y Transatlánticos deberían impulsar las exportaciones y crear empleos en Estados Unidos.
Sin embargo, las exportaciones son sólo una cara de la moneda. El libre comercio también impulsa las importaciones. Estas no sólo proporcionan bienes baratos y productos diferentes a los consumidores americanos, sino que también crean miles de empleos.
El economista Nouriel Roubini advertía a finales del mes pasado en el Foro Económico Mundial de que el crecimiento económico de los países denominados como los BRIC (Brasil, Rusia, India y China) está en riesgo: se “anunció con bombos y platillos” sus éxitos pasados, pero el futuro de los BRIC está en riesgo debido a su creciente estatismo.