Los ambientalistas de izquierda continúan luchando contra el auge del petróleo y del gas natural en el país. Ese auge tiene potencial no sólo para revitalizar ciertos sectores de la economía americana, sino para infundir vitalidad económica en algunas de las comunidades económicamente más angustiadas de la nación. No se sorprenda cuando estas comunidades hagan frente a la extralimitación regulatoria y a la histeria medioambiental.
En el tiempo que ha estado en el cargo, el presidente Obama ha hecho algunas propuestas y ha tomado algunas decisiones realmente malas sobre la política de energía y los americanos están pagando un alto precio por ellas, en mayores costos energéticos, en dólares de impuestos malgastados o bien en empleos que se han perdido por el camino. Para aquellos que no sigan la actualidad día a día, hemos recopilado una lista con las diez peores políticas de energía del presidente: