El presidente Barack Obama y el exgobernador Mitt Romney tuvieron una acalorada discusión sobre la energía en el hasta ahora último debate presidencial. El presidente repitió su estribillo de que la producción de gas y petróleo está en los niveles más altos de los últimos ocho años, pero Romney tuvo razón al apuntar que eso era debido a la producción de las tierras de propiedad privada y estatal.