La 18ª Conferencia de Naciones Unidas sobre el cambio climático concluyó hace dos días. Y como ocurrió en las 17 conferencias anteriores, las naciones en desarrollo exigieron que Estados Unidos y los demás países desarrollados les paguen por los efectos del cambio climático. En pocas palabras, que se ríen de nosotros. Por eso las conferencias de la ONU son cada vez más irrelevantes.
El presidente Barack Obama y el exgobernador Mitt Romney tuvieron una acalorada discusión sobre la energía en el hasta ahora último debate presidencial. El presidente repitió su estribillo de que la producción de gas y petróleo está en los niveles más altos de los últimos ocho años, pero Romney tuvo razón al apuntar que eso era debido a la producción de las tierras de propiedad privada y estatal.