Bradley Manning, el perturbado joven soldado que está enjuiciado por entregar información clasificada del gobierno de Estados Unidos a WikiLeaks, ha sido nominado para este premio. Ya que estamos, también podrían haber nominado a Bernie Madoff – ya que ambos traicionaron la confianza de aquellos que confiaron en ellos.
No podemos seguir repitiendo errores y seguir ofreciendo las mismas políticas fracasadas que convirtieron una ciudad vibrante en una ruina. Si la ciudad se hunde finalmente, será un gran símbolo de la filosofía progre de la gestión del declive a través de la dependencia. Si Detroit tiene éxito, será porque a sus ciudadanos se les ofrecen más posibilidades, más libertad, más trabajos y más oportunidades económicas.
El mercado respondería si el Congreso y la administración le permitieran funcionar. Las compañías petroleras responderían incrementando su producción y los consumidores se cambiarían a carros de consumo eficiente sin ninguna necesidad de un mandato de camiones y carros de consumo eficiente. Si el precio de la gasolina continúa subiendo, hará que las tecnologías alternativas sean todavía más competitivas económicamente. Pero las políticas que restringen la exploración petrolera, el refinado y la producción no deberían elevar el precio artificialmente.
En el curso de tres años, el presidente Obama ha seguido una política exterior que ha dejado a Estados Unidos menos seguro hoy y en mayor riesgo mañana. Un Irán nuclear, unos fallidos Afganistán e Irak, un no amistoso Egipto, un Israel en riesgo y unas fuerzas armadas infradotadas son todas ellas serias preocupaciones para el pueblo americano. En vez de seguir la mal fundamentada Doctrina Obama, es hora de que el presidente ponga primero la defensa de la nación y deje para el final el apaciguamiento de nuestros enemigos. Esa es una doctrina de la que puede depender el pueblo americano.