La libertad económica, que es el requisito previo de cualquier otra libertad, no puede ser libertad de toda preocupación económica, como nos prometen los socialistas y que sólo se puede obtener relevando al individuo de la necesidad y, a la vez, del poder de elegir; tiene que ser la libertad de nuestra actividad económica que, con el derecho a elegir, inevitablemente acarrea el riesgo y la responsabilidad de este derecho.
El 1 de agosto el Servicio Postal de Estados Unidos (USPS) incurrió en el impago de $5,500 millones provenientes de los pagos al Tesoro por los futuros beneficios médicos de sus jubilados. No se trata de una suma pequeña, sin duda. Pero para desgracia del USPS (y para ira de los contribuyentes) esta sólo marca el primero de diversos impagos anticipados y posiblemente aún mayores en meses venideros.