Justo antes del 4 de julio, el Centro de Investigación Pew hizo público un fascinante estudio sobre las ideas políticas de los americanos, dividiéndolas en siete categorías que van desde los “conservadores incondicionales” hasta los “firmes progresistas”. No obstante, lo que separa a progresistas y conservadores no es siempre en lo que creen. Sino por qué creen.
El contraste no podría ser más absoluto.
Mientras el presidente Obama hace público hoy su presupuesto ideal para este año (alabando al gobierno como el origen del éxito de Estados Unidos), el presidente de la Fundación Heritage Jim DeMint presenta su nuevo libro sobre las personas que están haciendo que este país funcione, día a día.