El Washington Post criticó de manera contundente el continuo aplazamiento de la decisión de la administración acerca del oleoducto Keystone XL, tildándolo de “absurdo” y “embarazoso”. Y lo hizo por un buen motivo, mejor dicho, por muchos buenos motivos. A continuación le mostramos 7 de los más convincentes:
Una buena noticia en el Día de la Tierra: ¡Podemos impulsar la producción de energía y el crecimiento económico sin perjudicar el medio ambiente!
Debido a los años de promesas vacías por parte de la Izquierda, los políticos del Congreso y la Casa Blanca han instaurado todo tipo de normativas perjudiciales que bloquean la producción de energía, el empleo y el crecimiento económico. No obstante, esas normativas han demostrado que son contraproducentes por sí mismas: no producen los beneficios que prometieron los progresistas y perjudican a los americanos.
Por si se lo perdió, ayer tuvo lugar una representación increíble en el Senado de Estados Unidos. Los progresistas dieron un espectáculo típico de un año electoral, alentados por el mismísimo presidente Barack Obama, y con el que intentaron imponer mayores impuestos sobre la industria petrolera como castigo por sus ganancias mientras que los precios del combustible están en su máximo histórico.