El plan de Ryan es algo tremendo. Tremendísimo. Su propuesta de $6.2 billones en ahorros de gasto (comparados al presupuesto de Obama) durante diez años es literalmente 100 veces más grande que el plan de los $61,000 millones que el Partido Republicano está intentando recortar esto año – y contra el que los demócratas están luchando ferozmente.
La propuesta presupuestaria del presidente del Comité de Presupuestos de la Cámara de Representantes, Paul Ryan (R–WI), por vez primera en los últimos tiempos, sitúa a nuestra nación en un camino diferente y mejor. Su solución para la doble crisis de gasto y deuda se alcanza a partir de verdaderas reducciones de gasto y reformas — no con nuevos o más altos impuestos.