Para todo aquel que esté preocupado con el tamaño del déficit y la deuda, el jueves trajo una buena noticia desde Washington: La Cámara de Representantes de Estados Unidos rechazó el proyecto de ley agraria que representaba un gasto de casi un billón de dólares. Pero aunque es una victoria, es sólo una temporal porque no significa la muerte de la ley. En el Congreso de Estados Unidos, los proyectos de ley no aprobados son como zombis: Muertos vivientes a los que reaniman cuando uno menos se lo espera.
Los medios de comunicación financieros están descubriendo que la China se ha atrapado a sí misma en una perjudicial política monetaria, uniéndose así a la larga lista de países en esa misma situación. Lo siguiente es que los medios de comunicación deberían comprender que la China no se enfrenta a una crisis sino a un problema a largo plazo para deshacer los efectos de malas decisiones tomadas a lo largo de varios años.
La Cámara de Representantes está debatiendo esta semana su proyecto de ley agraria y ahora los demócratas dicen que este no gasta lo suficiente en los cupones para alimentos.
El 80% del proyecto de ley “agraria”, que para nada tiene que ver, como imaginamos, con la agricultura, en realidad es para pagar por el programa de cupones para alimentos. Y no olvide que este programa se ha duplicado con la administración Obama.
El Congreso está tratando de confundirnos.
Así es como operan: Una ley nos va a costar billones de dólares, pero los miembros del Congreso no quieren que el público lo vea. Por eso, hacen que la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO) haga una previsión del proyecto de ley para sólo los primeros diez años y dejan fuera a propósito cualquier asunto costoso.