Hollande, por el contrario, prometió subir los impuestos a las grandes empresas y a las personas adineradas, implementar un tramo fiscal del 75%, incrementar el gasto público en 20,000 millones de euros, subir el salario mínimo, contratar 60,000 profesores más y bajar la edad de jubilación de los 62 a los 60 años para algunos trabajadores. Dice que es “el presidente de los jóvenes de Francia” y cree que el estímulo público es el modo correcto de alcanzar el crecimiento económico, no vía recortes de gastos.
Heritage ha creado su propia versión de “Julia” titulada Una mejor vida para Julia y en ella muestra cómo las personas se beneficiarían con reformas conservadoras como las del plan Para Salvar el Sueño Americano de la Fundación Heritage. La visión conservadora del futuro de Julia es una que faculta al individuo, no una que une sus éxitos a la expansión del gobierno federal.
Haciendo profundos recortes en defensa no es la forma de mantener la ventaja ante los rivales ni defender a la nación. “Las civilizaciones mueren por suicidio” decía el historiador y filósofo británico Arnold Toynbee. ¿Será que estamos transitando ya este camino? En la Fundación Heritage seguimos siendo tan optimistas como siempre y creemos en la fortaleza de los valores americanos. Por eso hemos ofrecido una solución en el Plan de Heritage: Para Salvar el Sueño Americano.
Se sabe cuando un político está buscando el aplauso cuando habla frente a una multitud de estudiantes universitarios y dice que está allí para ayudarles a devolver sus préstamos para estudios. Al fin y al cabo, ¿a quién no le gusta la perspectiva del dinero gratis? Pero como dice (en cierto modo) el dicho, cuidado con los políticos que anuncian regalos. Eso está siendo especialmente cierto esta semana pues el presidente Barack Obama está viajando por el país advirtiendo a los estudiantes de que sus tipos de interés en los préstamos para estudios están a punto de duplicarse.
El gasto en asistencia social y el derroche infinito no son los únicos responsables de los billonarios déficits de Washington. Los tres principales programas de derechos a beneficios (Medicare, Medicaid y el Seguro Social) suman la mayor parte del gasto federal y consumirán toda la recaudación tributaria hacia 2049. Sin embargo, aunque ese panorama surge amenazador en el horizonte, el Senado continúa rehusándose a aprobar un presupuesto, el presidente Obama se mantiene al margen y el gasto continúa sin control. Ayer en Fox News Sunday, el comentarista Bill Kristol dijo acertadamente: “Si Ud. quiere un gobierno grande, este es un gobierno grande”. Y si alguien debería estar “perplejo”, es el pueblo americano.