Los medios de comunicación han cubierto ampliamente las “huelgas” generales de ayer en el sector de la comida rápida. Sin embargo, muy pocos verdaderos trabajadores participaron en la #FastFoodStrike. El USA Today informa de que sólo “cientos de trabajadores del sector de la comida rápida” fueron a la huelga, de entre los 10.6 millones de empleados que tiene este sector en Estados Unidos. Menos del 1% de los trabajadores se unió a las protestas. ¿Entonces por qué tanto alboroto?
Si la mano de obra de alguien produce en torno a $8 la hora, ningún empleador lo contratará por más de esos ocho dólares. La empresa perdería dinero y pronto tendría que cerrar. Subir el salario mínimo hasta $9.80 la hora, como el senador Tom Harkin (D-IA) sugiere, pondría a muchos trabajadores sin experiencia fuera del mercado laboral.