No hace falta un pedazo de mármol para recordar a James Madison. En su lugar, tenemos la Constitución que creó la estructura para una libertad ordenada y más de 200 años de gobierno republicano estable y pacífico. Tenemos la Carta de Derechos que señala las libertades individuales específicas que todos los americanos poseen, especialmente el derecho a la libertad religiosa. Y, lo que es más importante, tenemos su legado aceca de cómo defender este documento.
Muchos periodistas izquierdistas, blogueros y comentaristas han estado explotando desvergonzadamente la tragedia del pasado fin de semana en Tucson, Arizona. Para ellos, hay una lección por aprender acerca de este acto de violencia sin sentido cometido por un hombre indudablemente con problemas. Paul Krugman del New York Times dice que él estaba incluso “hasta cierto grado, esperándose que sucediera algo como esta atrocidad”. Krugman concluye: “Si Arizona promueve algún examen de conciencia, podría ser un punto de inflexión. Si no, la atrocidad del sábado será solo el principio”. Este argumento …