El 14 de enero, la Casa Blanca desveló una política de mayor liberalización respecto a Cuba. Los nuevos cambios alteran las reglas que permiten una mayor flexibilidad para las visitas de ciudadanos americanos a la isla, permiten remesas no familiares (de hasta $500 por trimestre) y amplían el número de aeropuertos en Estados Unidos autorizados a permitir vuelos chárter a Cuba. La Casa Blanca anunció con bombos y platillos que las medidas “aumentarán el contacto personal; servirán de apoyo a la sociedad civil en Cuba; mejorarán el libre flujo de …