Desde la medianoche de hoy, la Wikipedia está cerrada durante 24 horas y centenares de otros populares sitios web también han hecho lo mismo. Se han unido para protestar las dos propuestas de ley que amenazan la seguridad de Internet y minan la libertad de expresión, todo ello en un intento por acabar con la “piratería” online — la distribución ilegal de material protegido.
El debate sobre la ley SOPA está ya entre los más intensos y polarizantes que tienen lugar en Washington — y con mucha razón. Con las preocupaciones por la libertad de expresión y la seguridad en Internet como el foco de la atención, los legisladores harían bien en buscar otras opciones cuando vuelvan en enero.