En sus días de senador, Barack Obama lo expresó perfectamente: ser criado sin un padre presenta serias desventajas. Así lo afirmaba en Chicago, sólo unos meses antes de las elecciones presidenciales de 2008:
Conocemos las estadísticas: los niños que crecen sin un padre tienen cinco veces más probabilidades de vivir en la pobreza y cometer delitos, nueve veces más probabilidades de dejar la escuela y veinte veces más probabilidades de acabar en prisión.
¿Qué haría falta para conseguir que Ud. se inscribiese en Obamacare? ¿Una canción simplona? ¿La adhesión de una celebridad? ¿Un anuncio y un baño portátil?
Puede que el dinero del contribuyente se use para todas esas cosas y más a medida que el 1 de octubre (la fecha en la que se supone que comenzarán los sistemas especializados de seguro médico) se vaya acercando.
El pasado lunes, la duquesa Kate dio a luz a un bebé real, el príncipe Jorge, en una habitación privada de la exclusiva Ala Lindo del Hospital St. Mary, por unos magníficos $9,600 la noche. Y aunque estamos seguros de que la duquesa recibió una excelente (y privada) atención médica, para los británicos comunes y corrientes, forzosamente afiliados al Servicio Nacional de Salud (NHS), la calidad de la atención no es seguramente la misma.
Erika Doring ha dedicado su vida y su carrera a los niños. Fue consejera de servicios de protección infantil durante 10 años y ahora posee Cutie Pie Consigment, una tienda de segunda mano en Hood River, Oregón, que vende productos para niños. Tiene una hija llamada Elaina, a la que adora. Aunque si se hubiese dedicado menos a los niños, puede que no hubiese terminado con esposas y acusada, increíblemente, de negligencia infantil.
El presidente Obama dice que está listo para retomar los asuntos “del día a día” sobre los que estamos hablando. Después de meses centrando su atención en el control de armas, la amnistía para los inmigrantes ilegales y otros temas secundarios que no encabezan la lista de preocupaciones de los americanos, es una buena noticia.