Desde los progres del Congreso hasta los canales de televisión por cable repiten con insistencia que la nación caerá en el impago a menos que el gobierno suba el límite de la deuda antes del 2 de agosto. Todo este tiempo hemos sentido que tal afirmación es, como mínimo, técnicamente errónea, ya que sin duda alguna sí seremos capaces de pagar los intereses de nuestros bonos. Sin embargo, lo más confuso es los que gritan más que nadie de que se debe subir el límite de la deuda también insisten …
A Ud. le sorprendería ver que muchos de los 30 millones de americanos definidos como “pobres” y necesitados de ayuda del gobierno no son lo que en gran medida Ud. se espera — en vez de no tener hogar y vivir en las calles, el hogar pobre promedio en Estados Unidos tiene lujos como el aire acondicionado, televisión por cable y consolas de videojuegos X-box.
¿Sabía Ud. que el gobierno federal pide prestados 40 centavos de cada dólar que gasta? La deuda nacional acumulada por estos préstamos y los anteriores ya alcanza el 70% de la producción económica anual del país y está camino de crecer hasta el 100% al final de esta década. Por eso es importante que se empiece a gastar menos o nos vamos a la ruina.
En su icónico libro Camino de servidumbre, Hayek especificó los pasos que conducen a las sociedades a abandonar la libertad individual y a sustituirla por planificación central y socialismo. La actual batalla de Estados Unidos para frenar el incremento de los programas de derechos a beneficios y el control del gasto público es un indicador del peligroso camino de servidumbre del país.