Estados Unidos ha llegado a una encrucijada en su política educativa. Un camino lleva hacia la opción escolar y la personalización; el otro hacia la centralización y la uniformidad. Si nuestro objetivo es una enseñanza centrada en el alumno, únicamente el camino hacia la opción escolar nos llevará a él. Y eso incluye la libre opción escolar en cuanto a estándares y evaluaciones.
Una reciente encuesta de Rasmussen muestra que la aprobación pública de la Corte Suprema de Estados Unidos se encuentra en su mínimo histórico. Sólo el 28% de los encuestados le otorgó a la Corte Suprema la calificación de “buena” o “excelente”, mientras la calificación de “mala” para los magistrados se ha elevado hasta el 30%. Esta calificación negativa es incluso mayor que la presentada por Rasmussen el año pasado tras la decisión de ratificar Obamacare.
Las decisiones de la Corte Suprema son fundamentales, pero no son la última palabra. Es nuestro deber como ciudadanos americanos seguir presionando, vía los tres poderes del gobierno, contra cualquier propuesta que viole la Constitución. Esa es la forma de asegurarse de que nuestra unión sobreviva durante otros 225 años.
Imagine verse obligado a recaudar un impuesto a las ventas para el gobierno de un estado en el que su empresa no tiene presencia o tener que afrontar auditorías por parte de un estado que está a miles de kilómetros de su sede central. Pues la Ley del Mercado Justo (MFA) representa este tipo de amenazas potenciales para las empresas por Internet y otros vendedores a distancia.
No todas las sorpresas son siempre buenas. Y cuando se trata de Obamacare es peor porque las proyecciones originales se convierten en lamentables realidades. Con once artículos especialmente escritos para explicar las consecuencias de Obamacare, la Fundación Heritage y Libertad.org han estado poniendo de relieve muchos de los diversos cambios en las proyecciones de Obamacare (por ejemplo, en costos, afiliación, efectos, etc.) desde que fuera aprobada hasta ahora. Hoy les entregamos el decimosegundo y último artículo de esta serie. Cerramos con broche de oro esta sección ya que les presentamos una sorpresita positiva de Obamacare.