El día de hoy marca el primer aniversario de la condena del abortista Kermit Gosnell, que fue hallado culpable del asesinato de bebés vivos mediante procedimientos abortivos tardíos y en pésimas condiciones. Se dictó sentencia en el tribunal el 13 de mayo de 2013, pero es terrible ver cómo se ha privado a los americanos del debate sobre este importantísimo asunto médico en el hemiciclo del Senado de Estados Unidos.
Cuando era jefe de gabinete del presidente Obama, Rahm Emanuel realizó esta declaración perturbadoramente honesta: “Nunca hay que desaprovechar una grave crisis”. Sin embargo, la histeria en torno al informe más reciente de la administración sobre el calentamiento global supone una variación del dicho: “Nunca pierda la oportunidad de crear una grave crisis”.