El 12 de julio, la administración Obama hizo pública una directiva del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) que elimina la exitosa ley de la reforma de la asistencia social de 1996. La nueva normativa de Obama permite que los estados dispensen del requisito laboral federal, el fundamento de la ley de reforma.
La libertad económica, que es el requisito previo de cualquier otra libertad, no puede ser libertad de toda preocupación económica, como nos prometen los socialistas y que sólo se puede obtener relevando al individuo de la necesidad y, a la vez, del poder de elegir; tiene que ser la libertad de nuestra actividad económica que, con el derecho a elegir, inevitablemente acarrea el riesgo y la responsabilidad de este derecho.