Justo cuando el “Team Obama” está tratando de que nos sintamos felices y contentos con nuestras relaciones con Irán, debido al “progreso” percibido en el acuerdo nuclear provisional (aunque no esté cerca de ser definitivo), va Teherán y lo destroza con algunos actos, digamos, “odiosos”. Vaya Día de San Valentín nos dieron.
Los recientes acontecimientos de Venezuela son simplemente las primeras consecuencias de un siniestro plan que se ha expandido rauda e irreverentemente en Latinoamérica.
El eslógan propagandístico “Socialismo del Siglo XXI”, que intenta expresar vaguedades conceptuales muy convenientes a los maquiavélicos fines de la izquierda, ha servido como máscara del poco conocido pero nocivo Foro de San Pablo.