En lugar de centrarse en la crisis de deuda del país, en el desempleo o en la inminente vorágine fiscal, el presidente está poniendo sus esfuerzos en una política que da para un buen tema de conversación en su guerra contra los ricos. Lo que la nación necesita son soluciones serias para nuestra crisis de gasto y de deuda así como normativas que realmente creen empleo. Lo que no necesita son distracciones de los problemas que tenemos a mano.
A nadie le gusta las subidas de impuestos, ¿no? No del todo. A los sindicatos de empleados públicos sí. En California, los sindicatos de empleados públicos pospusieron recientemente sus negociaciones contractuales hasta después de una votación sobre una iniciativa que subiría los impuestos. Los sindicatos respaldan la iniciativa y no quieren que sus nuevos contratos hagan que los californianos voten no.