“La última cosa que uno quiere hacer es subir los impuestos en medio de una recesión, ya que eso sólo absorbería, quitaría más demanda de la economía y metería a las empresas en un nuevo agujero”. Eso decía el presidente Obama en 2009, tratando de volver a asegurar a los americanos que iba a esperar hasta después de la recesión para subir los impuestos.
El Día de la Independencia (y cada día) los americanos deberían recordar y celebrar la imperecedera expresión de la Declaración de nuestros derechos, otorgados por Dios, a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad y rememorar a todos aquellos (pasados, presentes y futuros) que comprometen sus vidas, su libertad y su sagrado honor para defender estas verdades.
El mandato individual de Obamacare es en realidad un impuesto y es sólo uno de los muchos nuevos impuestos con los que se golpea a la clase media en Obamacare. Y quién lo iba a decir, otra promesa rota. El presidente Obama afirma que el mandato hace que la gente sea responsable, por lo que en consonancia con ese espíritu, he aquí un recordatorio de las otras promesas que el presidente y su ley de salud son responsables de haber roto…
Los Fundadores no querían que los estados, los intereses o las industrias usaran la asamblea legislativa nacional para gravar a otros estados, intereses o industrias de manera injusta. Por tanto, la Constitución crea ciertas limitaciones para los impuestos directos e indirectos: Los impuestos indirectos están sujetos a la Cláusula de Uniformidad y los impuestos directos están sujetos a la proporcionalidad.
en la Fundación Heritage nos mantendremos firmes en defensa de los principios fundacionales de nuestra nación. Estamos impacientes por encabezar la lucha para derogar esta ley intolerable –Obamacare– y estamos agradecidos por su respaldo a nuestras iniciativas para salvar el Sueño Americano para la siguiente generación.