Teniendo en cuenta el débil crecimiento económico del país, de sólo un 0.1% el trimestre pasado, merece la pena reflexionar sobre las iniciativas de recuperación que tanto el presidente Obama como sus seguidores pregonan que han sido un éxito. En su mayor parte, los defensores de las políticas económicas del presidente comentan que los principales indicadores económicos (concretamente el PIB, el empleo y la bolsa) se han recuperado en gran medida desde que la recesión tocó fondo en 2009.
No se crea la publicidad: la legalización de la marihuana supone demasiados riesgos para la salud y la seguridad públicas. Basándome en casi dos décadas de investigación, de trabajo de base con las comunidades y de práctica normativa a lo largo de tres administraciones presidenciales, en mi nuevo libro “Reefer Sanity” (La cordura del porro) debato algunos de los mitos más extendidos sobre la marihuana
Obamacare está sembrando el caos en la economía; el gasto en derechos a beneficios está engullendo el presupuesto federal; la preparación de las fuerzas armadas de Estados Unidos está bajo mínimos y un puñado de senadores está trabajando para asegurarse de que el gobierno permanece en el mercado de las finanzas inmobiliarias.