Estados Unidos deberá estar firmemente junto a Israel en el enfrentamiento contra la creciente amenaza nuclear de Irán. Si Jerusalén decide ejercer su derecho a la legítima defensa, entonces Estados Unidos y sus aliados deberían apoyar esa decisión, no condenarla. La brutal dictadura de Teherán ha sido advertida, con suficiente antelación, de que sus reiteradas violaciones a sus obligaciones legales en virtud de los tratados internacionales que han firmado tendrán un costo cada vez caro
La administración Obama debería desarrollar una estrategia proactiva que aborde el creciente conflicto mediante la inclusión de políticas que mitiguen las amenazas que Irán representa para la seguridad nacional de Estados Unidos, así como una respuesta coordinada en caso de que Israel ataque a Irán. Al hacerlo, la administración Obama deberá estar firmemente junto a Israel, reconociendo así el derecho de Tel Aviv a defenderse contra un régimen empeñado en “borrar [a Israel] de las páginas de la historia”.
Con la muerte de Villar, 2012 comienza con otro desafiante acto de protesta decisiva, dirigida a mantener la atención del mundo concentrada no en los pequeños ajustes económicos que están ocurriendo en Cuba ni en la saga de la lucha de Fidel Castro con la mortalidad humana, sino donde debería estar: En la lucha por la libertad y la dignidad de humildes cubanos como Villar.