La victoria de Trump, contra todos los poderes establecidos, dinero, burocracia, organización, medios de comunicación,… demuestra que el pueblo aún puede derrotar a las aristocracias y las oligarquías cuya inconmensurable avaricia a punto ha estado de cargarse del todo ese frágil experimento de la vida en libertad a que dieron luz entre los Padres Fundadores y Abraham Lincoln.