Comentábamos a principios de esta semana acerca de las formas en las que Obamacare desincentiva el matrimonio y el trabajo. Pero éstos no son los únicos valores tradicionales que socava.
Obamacare va en contra de dos valores que deberían ser absolutamente obvios: priorizar a los ciudadanos americanos sobre los no nacionalizados y priorizar la ayuda a los discapacitados sobre la ayuda a los adultos físicamente aptos.
¿Las ha visto? Nos referimos a las guías sobre cómo hablarle a su familia acerca de Obamacare durante las fiestas.
Es cierto, Organizar América (OFA), el grupo de campaña del presidente Obama, está realizando una gran ofensiva denominada “La atención médica durante las fiestas”, que insta a la gente a “tener una conversación” con sus seres queridos acerca de cómo conseguir un seguro médico. El Washington Post también publicó una “Guía para sobrevivir a los debates sobre Obamacare en Acción de Gracias”.
Se nos dijo que se pretendía que Obamacare fuera compasivo con los americanos en situación de necesidad.
Pero aunque puede que el presidente Obama y sus colegas progresistas tuvieran la mejor de las intenciones al forzar la aprobación de Obamacare en el Congreso, las normativas de esta ley no son para nada compasivas con quienes no tienen seguro médico ni con aquellos americanos con ingresos bajos o modestos.
Obamacare lleva al sistema de salud de Estados Unidos en la dirección equivocada al socavar la relación entre médico y paciente, centralizar el control y aumentar los costos médicos. Una verdadera reforma del sistema de salud facultaría a las personas, junto con sus médicos, para que tomaran sus propias decisiones respecto a su atención médica sin la interferencia del gobierno. Por tanto, se debería frenar Obamacare y derogarla totalmente. Posteriormente, el Congreso y los estados deberían promulgar reformas de libre mercado y centradas en el paciente para dar un mejor servicio a los americanos.
¿Sabía Ud. que hay 34 millones de formas diferentes de hacer una pizza de Domino’s?
Mary Lynne Carraway no las puede poner todas en su menú. Pero eso es lo que Obamacare le dice que tiene que hacer: Colgar un cartel con el menú en cada uno de sus 60 establecimientos de Domino’s que les diga a la gente la suma de calorías de cada posible combinación. Aunque por supuesto, toda esa información ya está disponible en Internet.