No sea malpensado. Me refiero al Estado. Éste es un debate que sacude el planeta.
El tamaño del Estado (o del gobierno, como dicen en Estados Unidos), por supuesto, importa mucho, pero lo realmente vital es la calidad (como en lo otro, lector malpensado). Lo esencial es cómo, en qué, por qué y quiénes se gastan los recursos que se les entregan, y no a cuánto ascienden.
El joven californiano de 17 años Tyler Hinsley les preguntó a los candidatos republicanos: “De cada dólar que yo gano, ¿con cuánto creen Uds. que yo merezco quedarme?”… En otro evento le hicieron la misma pregunta a la demócrata Jan Schakowsky que respondió: “Voy a decirlo de esta manera, Ud. no merece quedarse con todo”.
Los Fundadores de América sabían que la libertad es algo más que solamente garantizar las libertades políticas. La verdadera libertad requiere libertad económica – la capacidad de beneficiarnos de nuestras propias ideas y trabajo, de trabajar, producir, consumir, poseer, negociar, e invertir según nuestras propias preferencias.