Pakistán no es ni aliado ni enemigo de Estados Unidos, más bien, Pakistán tiene objetivos de seguridad totalmente diferentes a los de Estados Unidos en Afganistán y en la lucha contra el terrorismo en general. Cuanto antes acepten los políticos americanos esta realidad, Estados Unidos tendrá mayores oportunidades de alcanzar sus objetivos en la región.
Es hora de dejar de contar otra vez la misma historia del gran gobierno y poner a América en el nuevo camino de disciplina fiscal para el crecimiento económico. El Congreso y el presidente pueden empezar balanceando el presupuesto, bajando el gasto y reformando los derechos a beneficios como se expone en el plan de Heritage “Para Salvar el Sueño Americano”.
Desde que el S&P 500 alcanzó su máximo del año 2011 –del 29 de abril al 10 de agosto de 2011— 3.3 billones de dólares invertidos en el mercado de valores de Estdos Unidos se han esfumado. El valor de las acciones americanas en propiedad se redujo de $16.82 billones a $13.57 billones – todo un 19.3%. Eso es más que el PIB –el valor de todo lo que produce un país en bienes y servicios— en 2010 de Canadá ($1.3 billones), el Reino Unido ($2.2 billones) o Alemania ($3.1 billones).
Suena como sacado de una película. Un arma nuclear detona a gran altitud, generando una gran cantidad de energía electromagnética que produce gran devastación en Estados Unidos — destruyendo la electrónica, colapsando las comunicaciones, paralizando el transporte y apagando toda energía eléctrica. Desafortunadamente, la amenaza de un ataque de pulso electromagnético (EMP) es del todo real y es hora de que los líderes de América despierten ante esta realidad. Pero un arma nuclear no es la única forma en que puede generarse un ataque EMP. Incluso la actividad solar, si …
Rusia intenta expandir su influencia para constreñir la política de Estados Unidos. Líderes rusos como el ministro de asuntos exteriores Sergei Lavrov invocan, de forma habitual, un modelo “policéntrico” o multipolar del mundo, con Rusia laborando con sus socios para un futuro donde el poder de Estados Unidos esté tan disminuido que no pueda actuar sin el permiso de Moscú.