La candidatura de Putin a la presidencia de Rusia significa que puede convertirse en el líder ruso con más años de servicio desde que José Stalin gobernase durante casi 30 años. Putin, que ha ocupado el poder desde el 2000, podría permanecer al frente por dos períodos más de seis años cada uno, es decir, hasta el año 2024. Por otra parte, si el actual presidente Dmitri Medvédev después asume el poder, el “tándem” (como se conoce a la pareja Putin-Medvédev) podría gobernar hasta el 2036.
Las políticas de la administración de Obama han fracasado hasta este punto y un estancamiento a largo plazo al estilo de Japón también podría producirse a menos que haya un fundamental cambio de rumbo y se tomen pasos decisivos. Los dos pasos más importantes son detener las arremetidas reguladoras del gobierno federal y poner el presupuesto federal en un camino creíble hacia el equilibrio mediante la reducción del gasto de forma rápida y constante.
Legatum ha anunciado con bombos y platillos el erróneo resultado de que China ha eclipsado a Estados Unidos en la estrecha dimensión económica de su medida de prosperidad. Una comparación bilateral con fundamentos tan cuestionables debería ser tratada en consecuencia, no destacada como un gran resultado.
El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, anunció su renuncia el martes después de que la coalición gobernante de Italia perdiera su mayoría en la Cámara Baja. Aunque el parlamento votó a favor de aprobar una ley de austeridad presupuestaria clave exigida por la Unión Europea, el gobierno sufrió una serie de deserciones que convirtió en insostenible la posición a largo plazo de Berlusconi.
El nombramiento del equipo original de representantes especiales de Obama fue considerado por muchos como una manera de facultar a dedo a altos cargos para instigar una política exterior “transformacional” sin someterlos a la confirmación del Congreso. El principal objetivo parecía ser demostrar el nuevo enfoque de Obama sobre la humildad americana y el acercamiento diplomático en contraste con el supuesto énfasis del “poder duro” de la administración de George W. Bush.