La verdadera cara del movimiento “Ocupar Wall Street” empieza a manifestarse, tanto en sus obras como en afiliación. La imagen que se está revelando ante nosotros es una de creciente violencia en combinación con afiliaciones extremistas que son cualquier cosa menos representativas del 99% de americanos que el movimiento dice defender.
El gasto está fuera de control y se va a poner peor con la presente política escogida. Los conservadores no tenemos razón alguna para aceptar una mayor presión fiscal sólo para que Washington pueda gastar más. Esta batalla es acerca de poner el gasto bajo control y limitar el tamaño y alcance del gobierno. Dicho simplemente, más impuestos significan más gobierno.