Al oír cómo describe el presidente Barack Obama la retirada de las tropas americanas de Irak, uno podría pensar que se trata de una largamente anticipada victoria política, la culminación de una promesa hecha cuando hacía campaña para llegar a la Casa Blanca. Pero su anuncio la pasada semana de que las tropas americanas en Irak volverían a finales de año es el resultado de un serio fracaso de la administración Obama
Incapaces de convencer a los americanos de que un nuevo estímulo de medio billón de dólares a pagarse con nuevos impuestos sea una buena idea —ni siquiera convencen a sus correligionarios del Partido Demócrata— ahora intentan que se apruebe subrepticiamente al menos una parte, empleando una narrativa simpaticona – pero falsa.
El Senado empezará hoy a valorar la propuesta de 860 páginas presentada por Harkin para reescribir la Ley de Educación Primaria y Secundaria (ESEA). El proyecto representa añadir más regulaciones y más burocracia a los distritos escolares locales, manteniendo el statu quo de la reforma educativa dictada desde Washington. Y el problema es que el Senado no ha tenido tiempo para examinar en detalle la legislación que se propone, no digamos ya para oír las voces de aquellos a los que busca controlar.
Pero la política que los manifestantes de Ocupar Wall Street están proponiendo —así como su rechazo del sistema capitalista— no hará que la economía mejore para los 14 millones de americanos desempleados ni para todos aquellos con problemas debido a esta economía estancada. De hecho, muchas de las exigencias de los manifestantes son claramente peligrosas y nos alejarían más de su declarado objetivo de mejorar las condiciones económicas para “el 99%”.