Estados Unidos tiene una sólida tradición en la defensa de los disidentes políticos y religiosos. Ya sea el motivo del silencio de Estados Unidos el que esta tradición se haya quebrantado o bien se deba a la titubeante política de la administración para Medio Oriente, una cosa es segura: Podemos y deberíamos hacerlo mejor.
En un gesto poco habitual, Dilma Rousseff, presidenta de Brasil, canceló una visita a Estados Unidos alegando su descontento con la respuesta de la administración Obama a raíz de las acusaciones de espionaje contra la Agencia de Seguridad Nacional (NSA). Este embarazoso desaire debería obligar a la Casa Blanca a rectificar su política exterior en la región.
Israel Ortega, editor de nuestra web Libertad.org, y José Sueiro, director de Metrodiversity, debaten todas las semanas en Telenoticias Washington. En este programa, Sueiro y Ortega verdaderamente dan una Batalla de Ideas. Hoy: Las ventajas y desventajas de Obamacare.