Es improbable que Israel y Palestina alcancen un verdadero acuerdo de “paz” si no hay más temas sobre los que puedan estar de acuerdo. El secretario Kerry debería tener cuidado de no crear la expectativa de que estas conversaciones van a ser diferentes simplemente porque Estados Unidos tenga nuevos negociadores. De hecho, debería aprender de los errores del pasado.
En Estados Unidos, los tribunales a menudo dictaminan el resultado de unas elecciones cuando éstas están muy igualadas, actuando como una herramienta de mediación entre los candidatos, para garantizar así la legitimidad de los resultados. Al final, lo peor que puede suceder es que se declare a alguien como perdedor de las elecciones. Puede que se arruinen las esperanzas y los sueños de algunas personas, pero la vida sigue.
Está previsto que el 1 de enero de 2014 (a los tres meses de iniciarse el nuevo ejercicio fiscal) entren en vigor los nuevos derechos a beneficios de Obamacare. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO), el gobierno federal gastará $48,000 millones en 2014 y cerca de $1.8 billones hasta 2023 en estos nuevos programas de derechos a beneficios.
En un correo electrónico enviado recientemente a sus seguidores, el presidente Obama se lamentaba de la frustrante falta de competencias de su cargo. “Hay tantas limitaciones a lo que puedo hacer por mí mismo” sin el Congreso, confesaba.
En términos de interpretación constitucional, tiene razón. Pero en la práctica, el presidente ha mostrado un marcado menosprecio por los límites legales de su poder.