Si Estados Unidos de verdad quiere conservar sus derechos en el mar, entonces necesita reforzar la única herramienta que ha garantizado esos derechos a lo largo de la historia: una sólida Armada de Estados Unidos. Por desgracia, con el presidente Obama en el cargo, Estados Unidos está viendo su flota disminuida en tamaño y capacidad. Un solitario pedazo de papel no defenderá los intereses de Estados Unidos en el mar y tampoco lo hará el transferir miles de millones de dólares a una autoridad internacional en Jamaica para su redistribución por todo el mundo. La CONVEMAR no debería ser ratificada ni firmada y en su lugar Washington debería volver su atención a asegurarse de que la Armada de Estados Unidos tiene los recursos que necesita para proteger los intereses de Estados Unidos en alta mar.
Aunque Europa necesita soluciones, desde luego que no debería estar mirando al presidente Obama en busca de respuestas. Durante su mandato, el desempleo ha subido, más gente está desempleada durante más tiempo, los precios del combustible son más altos, el costo del seguro médico ha aumentado, la deuda nacional es mayor, el gasto federal se ha incrementado, más americanos necesitan estampillas de comida, los costos de los regímenes reguladores son mayores, el valor de las casas ha descendido, la recuperación económica de Estados Unidos es históricamente lenta y aunque el gasto federal en educación ha aumentado, los resultados siguen igual de planos.
La demanda de Notre Dame es una de las 12 demandas presentadas ayer por 43 demandantes contra la regulación de Obamacare. Además, otras instituciones ya han presentado demandas en busca de la protección de la libertad religiosa. Los demandantes que han emprendido acciones judiciales contra el mandato de Obamacare incluyen instituciones católicas, instituciones protestantes, dueños de negocios que son religiosos y varios gobiernos estatales.
China no es el único gobierno comunista que se interpone a la libertad. Muy cerca de los Cayos de la Florida, el régimen de Castro continúa manteniendo un férreo control sobre el pueblo cubano. Ayer se cumplieron los 110 años de la independencia de Cuba, pero tristemente 53 de esos años han transcurrido bajo la dictadura de los Castro.