La OEA, con Estados Unidos y los auténticos partidarios de la democracia representativa (incluido, esperemos, un Brasil aunque con inclinaciones izquierdistas), deberían trabajar para reconducir la situación hacia unas elecciones libres y justas y aunar el respaldo y el consenso interno dentro de Paraguay para una transición no conflictiva hasta las elecciones así como hacia la restitución del orden y la estabilidad en un país con problemas en su democracia.
La presidencia imperial de Obama ha anulado de nuevo al Congreso y a la ley. No contento con ponerse a volver a redactar las normativas de inmigración, educación y energía, ayer, el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) del presidente Obama eliminó los requerimientos federales para el trabajo que eran el fundamento de la reforma de la asistencia social de la era Clinton.
Ayer, el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) de Obama publicó una directiva de normativa oficial redactando de nuevo la ley de reforma de la asistencia social de 1996. La nueva normativa elimina los requerimientos laborales federales que eran el fundamento de la ley de reforma. La directiva de Obama acaba con la letra y el espíritu de la verdadera legislación de la reforma.