La libertad religiosa y el respeto a la libertad de conciencia deben ser fomentadas y protegidas, tanto en la sociedad civil como en el derecho y la política, como forma efectiva y acorde con nuestros principios para promover la paz social y la fraternidad cívica en una sociedad cada vez más pluralista.
En el improbable caso de que el gobierno de Estados Unidos llegara al verdadero límite de la deuda el 2 de agosto, según lo que nos han vendido, el gobierno federal todavía estaría camino de recaudar unos $2,2 billones en este ejercicio fiscal. Eso no va a cambiar. Y el interés neto para el año aún sería de unos $205,000 millones, o sea, menos de una décima parte de los ingresos por recaudación. Y a la luz de las consecuencias, no hay duda de que el presidente Obama y su secretario del Tesoro se asegurarían de que los pagos de intereses se hagan a tiempo y en su totalidad.
A pesar de gastar casi $16 billones desde la Guerra contra la Pobreza comenzó en 1964, los programas de asistencia social no han logrado reducir las causas de la pobreza y en cambio han perjudicado a muchas de las personas a las que buscaban ayudar. La pobreza en Estados Unidos está enormemente vinculada a la ausencia de los padres y a la falta de trabajo, pero los pagos de la asistencia social han tenido efectos destructivos erosionando la institución del matrimonio y la ética de trabajo en comunidades de bajos ingresos.