La interpretación personal de la naturaleza humana probablemente determinará si se es progresista o conservador. En un momento en que nuestro país está profundamente dividido, nunca ha sido tan importante entender la diferencia entre el concepto de la naturaleza humana para la izquierda y para la derecha.
Muchos americanos ignoran que los derechos humanos son derechos fabricados y no son los mismos que los derechos naturales dotados por Dios o la naturaleza. Lo que a menudo se denomina como “derechos humanos” en la actualidad son constructos sociales y son fundamentalmente incompatibles con el criterio de los Fundadores sobre los derechos naturales.
Esa obligación es tan importante ahora como lo era hace 70 años cuando Estados Unidos se enfrentó a uno de sus mayores desafíos. Tal como se hizo entonces, el Congreso y el presidente deberían garantizar que el gobierno federal cumpla con su responsabilidad hoy en día y financie plenamente a nuestras fuerzas armadas.
Hoy en día, la libertad económica todavía depende de la fortaleza de las instituciones de seguridad nacional de América. Estados Unidos debe reconsiderar seriamente su compromiso con el Tratado sobre Derecho del Mar que socava la soberanía del país al interferir con las operaciones de la Marina de Estados Unidos en alta mar y podría costar billones de dólares en ingresos perdidos. La capacidad de la Marina de Estados Unidos para proteger la libertad de los mares hoy en día sigue siendo de vital importancia a medida que las tensiones en el Mar Meridional de China siguen creciendo.