Las olvidadas noticias provenientes del Departamento Locos por Culpa del Calor cuentan que los activistas contra la sobrepoblación global están están irritadísimos porque la estrella del fútbol David Beckham y su esposa, Victoria, se han atrevido a seguir engendrando hijos. Vaya ejemplo de “crimen contra la naturaleza”. Afortunadamente, como señalaba el Wall Street Journal, los Beckham tuvieron la cordura de no perder los estribos después de que el nacimiento de su cuarto hijo desatara las iras de una organización británica sin fines de lucro llamada Population Matters.
Ryan dice que, en su rol como político, se toma en serio las enseñanzas de su iglesia, especialmente el llamamiento a ayudar a los pobres. Pero no se puede equiparar esta norma moral con el aumento del tamaño del Estado de bienestar.
La doctrina social no es monopolio de un partido político, ni es un imperativo moral que confunde la opción preferencial para los pobres, con una opción preferencial por un gobierno más grande.
La libertad religiosa y el respeto a la libertad de conciencia deben ser fomentadas y protegidas, tanto en la sociedad civil como en el derecho y la política, como forma efectiva y acorde con nuestros principios para promover la paz social y la fraternidad cívica en una sociedad cada vez más pluralista.
Los jóvenes con padres que se involucran en sus estudios disfrutan de una relación más estrecha con ellos y son menos propensos a presentar problemas de conducta, a experimentar con conductas de riesgo y gozan de una mejor salud emocional. Además, tienden a lograr mejores calificaciones y mayores niveles de educación.