El 16 de noviembre, el presidente Barack Obama y la primera ministra australiana Julia Gillard anunciaron su intención de que el Cuerpo de Marines y la Fuerza Aérea americanas incrementen el entrenamiento militar en Australia. Esta ampliación de la presencia militar de Estados Unidos tiene la intención de mejorar la interoperabilidad aliada y tranquilizar a nuestros amigos y aliados en la región preocupados por una crecientemente asertiva China.
La muerte de Osama bin Laden fue una victoria duramente ganada por Estados Unidos, pero los beneficios obtenidos en la búsqueda de ese día de justicia y por librar la guerra de Afganistán —incluido poner a al-Qaeda a la fuga— podrían dilapidarse si la administración Obama continúa con el rumbo establecido.
Hace veinte años el mundo vio cómo caía la Unión Soviética. El régimen “plantado por bayonetas”, como en una ocasión lo describió el presidente Ronald Reagan, no consiguió arraigarse y finalmente el imperio que se amuralló tras una Cortina de Hierro para aislarse de Occidente no pudo escudar a su pueblo de la refulgente luz de la democracia.
Tres son los programas de derechos a beneficios que nos traen por la calle de la amargura: El Seguro Social, Medicare y Medicaid. Los políticos saben que estos tres programas son las vacas sagradas del presupuesto, temen siquiera hablar de recortes porque eso los dejaría expuestos a la ira electoral de muchos beneficiarios. Sin embargo, la cruda realidad nos dice que no podemos seguir por el mismo camino, pidiendo prestado dinero que no tenemos para cubrir el financiamiento de estos programas.
La Fundación Heritage coauspiciará el debate presidencial republicano sobre política exterior y seguridad nacional conjuntamente con el American Enterprise Institute (AEI) y la CNN según anunciaron anoche representantes de los dos centros de investigación política con sede en Washington y la cadena global de noticias por cable.