Hay miles de personas que no se están muriendo de hambre en Míchigan. Este impactante acontecimiento tiene lugar a pesar de una de las peores cosechas que se recuerde. Con la escasa producción recogida en los huertos y campos locales, había quien se temía lo peor. Pero a pesar de la sequía, los supermercados tiene llenos los estantes y además a unos precios razonables.
Una carta remitida por 232 organizaciones representativas de diversas industrias más la Cámara de Comercio de Estados Unidos, exhorta al presidente Obama y al Congreso a que reestructuren los programas de derechos a beneficios de la nación y que los pongan en el camino hacia la sostenibilidad financiera.
No se habla de otra cosa: el abismo fiscal. Y es que el 1 de enero de 2013 se nos viene una avalancha de impuestos.
Hace poco más de un año, la Fundación Peter G. Peterson reunió 5 institutos de política pública y subvencionó sus iniciativas en busca de una solución a la enorme deuda pública que aqueja a Estados Unidos. El plan de la Fundación Heritage es el que mejor alcanza esos objetivos, como muestra El Gráfico de la Semana.
Hay una cuestión en la mente de todos en Washington: el “abismo fiscal”. Nos estamos quedando sin tiempo para evitar que nos alcancen las masivas subidas de impuestos del 1 de enero así como las amplias reducciones presupuestarias que está previsto que lleguen al mismo tiempo, de modo que la economía se está preparando para otra tormenta.