No todas las sorpresas son siempre buenas. Y cuando se trata de Obamacare es peor porque las proyecciones originales se convierten en lamentables realidades. Con once artículos especialmente escritos para explicar las consecuencias de Obamacare, la Fundación Heritage y Libertad.org han estado poniendo de relieve muchos de los diversos cambios en las proyecciones de Obamacare (por ejemplo, en costos, afiliación, efectos, etc.) desde que fuera aprobada hasta ahora. Hoy les entregamos el decimosegundo y último artículo de esta serie. Cerramos con broche de oro esta sección ya que les presentamos una sorpresita positiva de Obamacare.
A la gente del “piensa globalmente” se ponen intolerantes cuando la historia del calentamiento global no suena tan aterradora como la local. Los activistas del cambio climático tomaron el reciente informe de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), que muestra que 2012 ha sido el año más cálido registrado en la región continental de Estados Unidos, hicieron un truco de prestidigitación geográfica y le dieron vueltas hasta convertirlo en una historia como la de la película Chicken Little pero esta vez acerca del calentamiento global.
¿Qué pasa cuando un programa del gobierno no hace lo que se supone que debe hacer? Head Start, el programa federal de preescolar dice que, según su eslógan, “fomenta la preparación escolar de los niños de familias con bajos ingresos con edades entre 0 y 5 años para mejorar su desarrollo cognitivo, social y emocional”. Sin embargo, las propias evaluaciones del gobierno han mostrado que simplemente no lo hace.
La Fundación Heritage acaba de publicar conjuntamente con el Wall Street Journal la 19ª edición del afamado Índice de Libertad Económica. Esta investigación demuestra como algunos países van perdiendo libertades con el transcurrir del tiempo y como otros van ganándolas. El Índice estudia asuntos como la confianza en las instituciones, el Estado de Derecho, la intromisión del gobierno en la economía libre, el nivel de corrupción, la división de poderes, restricciones, expropiaciones y datos económicos tales como el nivel de inflación, del gasto público y la deuda nacional.
No todas las sorpresas son siempre buenas. Y cuando se trata de Obamacare es peor porque las proyecciones originales se convierten en lamentables realidades. Durante estos días, la Fundación Heritage y Libertad.org siguen poniendo de relieve muchos de los diversos cambios en las proyecciones de Obamacare (por ejemplo, en costos, afiliación, efectos, etc.) desde que fuera aprobada hasta ahora.